La importancia de la mínima invasión en odontología, hace que recorramos un trecho enorme que favorece al dentista y al paciente. En Inspiria, se parte de la mínima invasión y máximos resultados.
Al darle la importancia que se merece la mínima invasión en odontología, nos ponemos de parte del paciente. Sabemos que, por muy necesaria que sea, una visita al dentista no suele ser agradable. Por eso, seguir la ley de la mínima invasión permite ofrecer tranquilidad y seguridad al paciente. Y todo gracias a las innovaciones tecnológicas en odontología.
Mínima invasión odontológica
La mínima invasión odontológica, no lo confundamos, no habla de hacer el mínimo trabajo en el espacio bucodental. De nada sirve tratar “por encima” una caries, por ejemplo. Cuando hablamos de mínima invasión, hablamos de la filosofía de Inspiria. Lo que buscamos es detectar el problema a tiempo e intervenir. Evitando así, que se extienda o aumente el dolor. De esta manera, se interviene de una manera más suave, consiguiendo así que no aumente una infección y menos, un dolor.
Al no aumentar, implica menos deterioro y por lo tanto, evitaría una intervención más grande y agresiva. Con la mínima invasión odontológica, motivamos al paciente a un cuidado y un posterior mantenimiento. Para no llegar a una eliminación de la pieza dental o una endodoncia, se parte de la mínima invasión, con la ayuda de la prevención.
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Este método de trabajo permite aumentar la confianza en el tratamiento. No sólo va incluida la odontología preventiva, sino también la posible posterior curación. Si quiere conocer algo más sobre este tipo de trabajo, no dude en contactar con Knotgroup. Y le informaremos de todo lo que necesite, para formar parte de este equipo cuya razón de ser es seguir trabajando en una línea ascendente en cuanto a innovación en odontología.