En un artículo anterior hablamos de la importancia de emplear una cámara intraoral odontológica en la clínica y de las ventajas que esto supone tanto para el paciente como para el odontólogo.
Hoy hablaremos de los aspectos a tener en cuenta para elegir la cámara intraoral odontológica que mejor se adapte a las necesidades de cada profesional. Al igual que ocurre con otros dispositivos tecnológicos, la variedad de cámaras disponibles es muy amplia, así como sus prestaciones y sus precios.
La mayoría de las cámaras intraorales del mercado son digitales y funcionan con software. El elemento que se introduce en la cavidad bucal es una pequeña pieza con luz incorporada y con una o más lentes. Puede conectarse al ordenador mediante cable, aunque las más modernas utilizan tecnología inalámbrica.
¿Qué hay que tener en cuenta en una cámara intraoral odontológica?
Para escoger la cámara intraoral odontológica que mejor se ajuste a las necesidades de tu clínica dental debes tener en cuenta los siguientes aspectos:
La calidad de la imagen
A mayor resolución, la cámara intraoral odontológica ofrecerá mayor nitidez. Una imagen poco nítida no es útil, por lo que conviene elegir un modelo con 1 Mp de resolución como mímimo. Otros factores que influyen en la calidad son el tipo de sensor, el autoenfoque y la saturación de ocres. Una cámara con saturación de ocre ofrece gran exactitud de tonalidades, algo muy útil en tratamientos estéticos.
El tipo de luz
El tipo de luz y su potencia influyen en la nitidez. La mayoría de cámaras funcionan con luz LED, más resistente, duradera y fiable. Algunos modelos de cámara intraoral digital están equipadas con luz UV para detección de caries.
Otros factores importantes
El ángulo de curvatura, el tipo de almacenamiento (tarjeta de memoria), la conexión (USB o Bluetooth), contar con display y la capacidad para realizar distintas tomas intraorales y extraorales son prestaciones que influyen en el precio de la cámara intraoral odontológica pero que se rentabilizan rápidamente.
Contar con tecnología avanzada facilita la labor del odontólogo y aporta un gran valor añadido de cara al paciente.